Ronderos urbanos «Los Jaguares» frustran robo

• Y la Policía Nacional niega denuncia

Un asentamiento humano en el distrito de Punchana, fue escenario de un intento de robo que pudo haber tenido consecuencias fatales si no fuera por la oportuna intervención de los ronderos urbanos campesinos «Los Jaguares». El incidente ocurrió en la comunidad de Unión, donde un menor de edad intentó robar el balón de gas de un anciano, amenazándolo con quitarle la vida.

Los familiares y vecinos de la víctima, aterrorizados por la amenaza, alertaron a los ronderos, quienes rápidamente respondieron al llamado. Durante la intervención, los ronderos lograron neutralizar al menor, quien tenía en su poder dos municiones y un arma blanca. Este hallazgo no solo subraya la peligrosidad de la situación, sino que también resalta la gravedad del crimen que estaba a punto de cometerse.

Sin embargo, el caso tomó un giro inesperado cuando los ronderos trasladaron al joven a la comisaría de Punchana. A pesar de la evidencia contundente y la gravedad del delito, los efectivos policiales se negaron a recibir la denuncia, un acto que ha generado profunda indignación entre los ronderos y la comunidad. Según los testimonios, no es la primera vez que las autoridades policiales de Punchana actúan de esta manera, ignorando denuncias y dejando a la población en un estado de vulnerabilidad.

«Nos sentimos abandonados y desprotegidos,» expresó un miembro de «Los Jaguares». «Hacemos nuestro trabajo para mantener la seguridad en nuestra comunidad, pero si la policía no hace su parte, estamos en una lucha constante y desigual contra el crimen.»

Este incidente pone en evidencia una preocupante falta de colaboración y apoyo por parte de las autoridades policiales hacia los ronderos urbanos, quienes juegan un papel crucial en la seguridad comunitaria. La negativa de recibir la denuncia no solo desacredita el trabajo de los ronderos, sino que también envía un mensaje peligroso a la comunidad sobre la falta de consecuencias para los delincuentes.

Es imperativo que las autoridades locales tomen medidas urgentes para fortalecer la relación entre la policía y los ronderos, garantizando que cada denuncia sea tomada con la seriedad que merece. La seguridad de Punchana depende de una cooperación efectiva y respetuosa entre todos los actores involucrados en la protección de la comunidad.

La situación en Punchana es un llamado de atención a las autoridades regionales para que revisen y reformen los protocolos de respuesta policial. La comunidad necesita una fuerza policial que esté comprometida con la protección de todos los ciudadanos, y que trabaje en conjunto con los ronderos para asegurar un entorno seguro y justo para todos.